Los platillos que no te puedes perder
Chaya de pavo o ganso
Especie de estofado con carne de pavo o ganso, cebolla, papa y zanahoria envueltos en repollo.
Costillar a las llamas
Costillar vacuno macerado en sal gruesa y aceite de oliva y cocido en ramas de romero.
Sidra de Tunuyán
Bebida alcohólica de baja graduación fabricada con jugo fermentado de manzana.
Tabletas mendocinas
Galletas rellenas con manzana, miel, nueces y almendras y cubiertas con azúcar glass.
Tunuyán y todo el Valle de Uco cuentan con una cocina de fusión, en la que el vino de la zona tiene un papel preponderante
Enmarcado por la cordillera de Los Andes y los viñedos del valle, Tunuyán se ha convertido en un lugar mágico donde disfrutar de visitas a modernas bodegas y degustaciones de vinos artesanales premiados a nivel internacional. Este destino, junto con San Carlos y Tupungato, constituyen el gran Camino del Vino del Valle de Uco, donde el turismo gastronómico ha tenido auge al combinar la comida con el enoturismo.
El platillo que da identidad al Valle de Uco y reúne las particularidades de los tres departamentos es la chaya de pavo o ganso, cuya preparación es similar a la de un estofado, en el que se incluyen cebolla, papa y zanahoria, junto a la carne de ave envuelta en repollo.
Además aquí se puede saborear un suave lomo al malbec, y otros platillos criollos como el costillar a las llamas, preparado con costillar vacuno macerado en sal gruesa, aceite de oliva y ramas de romero; chivo de montaña a fuego lento y lechón crocante al horno de barro. También destacan pastas o empanadas de masa suave a base de leche, fritas u horneadas rellenas con diferentes guisados, especialidades con truchas ahumadas y champiñones y otros pescados. Con cada menú se recomiendan distintas variedades de vinos, la mayoría producidos en las cercanías de cada restaurante, entre los que destaca el malbec, pero también hay excelentes torrontes, pinot noir, cabernet sauvignon y cabernet franc.
Además son populares la carne de ternera cocida al horno servida con salsa de chimichurri, barbacoa, queso crema o salsa tártara; la carne a la olla preparada con vino blanco; y el tomaticán, especie de ensalada elaborada con jitomates tipo cherry cultivados de forma orgánica cuyo sabor es dulce y de suave aroma, así como con cebolla cambray y huevo. Son típicas las deliciosas aceitunas mendocinas ya sean condimentadas, rellenas con almendras, sardinas o queso roquefort.
No hay que olvidar que Tunuyán es una zona de manzanos, por lo que la sidra, fabricada con el jugo fermentado de la manzana, es también muy popular. Para endulzar el paladar el destino ofrece todo tipo de dulces de manzana, como las tabletas mendocinas rellenas con manzana, miel, nueces y almendras y cubiertas con azúcar glass; con las que también se preparan conservas y alfajores de maicena.
