San José del Cabo ofrece a sus visitantes lo mejor de la gastronomía internacional, con opciones para todos los gustos y bolsillos. Sin embargo, se distingue por servir diariamente pescados y mariscos frescos provenientes del mar de Cortés y el océano Pacífico. En la cocina local abundan platillos preparados con langosta, abulón (molusco conocido como oreja de mar), camarón, jaiba (especie de cangrejo) y todo tipo de pescados, teniendo al marlín como estrella. Pero el platillo típico son los tacos de pescado, camarón o pulpo, que se acompañan con col o repollo, guacamole y crema, así como las doraditas, una especie de quesadilla rellena de jaiba, y las tostadas de marlín. También destaca la machaca de mantarraya, preparada con jitomate, chile serrano, cebolla y cilantro. Se pude comer en tacos, tostadas o a manera de burrito, con tortillas de harina. Los tamales de Güemes, elaborados con carne de cerdo y pollo, pasas, aceite de oliva y aceitunas, son muy populares. También está el tradicional platillo conocido como comida de pobres, una sopa de mariscos, arroz y frijoles acompañada con tortillas de harina. Las almejas chocolatas son típicas de las costas bajacalifornianas. Se asan en su concha o se tateman, es decir, se cuecen boca abajo sobre una cama de piedra con romero y se sirven con tortillas de harina y diversos tipos de salsas.
Para quien prefiere la carne también hay opciones, como los burritos de machaca, el relleno se prepara salando carne de res, secándola y triturándola. En San José se suele comer como desayuno, aunque los podrás encontrar en cualquier momento del día.
Y para refrescarse, nada mejor que un vino de Baja California, agua de pitaya o el típico licor de damiana, elaborado con la planta silvestre del mismo nombre, alcohol de caña de azúcar, agua y azúcar, se toma como digestivo o para reemplazar al triple sec en las margaritas.
Entre los dulces tradicionales puedes encontrar los ates y frutas de temporada en almíbar, complemento ideal para tan deliciosos platillos en San José del Cabo.
Estas delicias las puedes probar en el restaurante Mi Cocina del hotel de Casa Natalia; si te gustan las agradables sorpresas, no dejes de visitar Casianos, un restaurante de cocina espontánea, en donde no hay menú establecido; en Morgan’s te darás gusto con su panadería y pastelería elaborada con productos orgánicos y claro, su cava de vinos.
