La Chapelle-en-Serval se encuentra en una región de tierra fértil que permite que su gastronomía sea muy variada
La comida de La Chapelle-en-Serval y la región se ve beneficiada de la variedad de productos, que comprenden papas, endivias, poro, frijoles de Soissons, carne de pato, cordero criado en una zona específica y cassonade, que es azúcar rojiza de caña de azúcar. De igual forma se elabora pâté de canard d’Amiens, un paté de pato con corteza que lleva grasa de cerdo, manzanas, coñac, trufas o champiñones, chalotes, pan, huevo y especias; paté de anguilas del río Somme, y maroilles, queso de leche de vaca con denominación de origen controlada.
Prueba los platos típicos regionales como caghuse, que es cerdo cocinado al horno con cebollas y servido con papas; emincés de veau à la picarde, escalopas de ternera con manzanas, betabel y una salsa a base de crema; goigot d’agneau à la soissonnaisse, que es pierna de cordero con frijoles de Soissons, y lapin au cidre, carne de conejo en trozos enharinados y fritos con mantequilla que llevan chalotes, sidra y mermelada de grosella. También se preparan velouté soissonnais, sopa crema de frijoles de Soissons, con cebolla, ajo, crema, hierbas de olor, tocino y crotones de pan para servir; flaminche aux poireaux, una especie de tarta que lleva poro, huevo, mantequilla y crema, y ficelles, crepas rellenas de un guiso a base de champiñones con chalotes y vino blanco.
Entre los postres tradicionales está la crema chantilly, originaria de la región; gâteau battu, un panque de consistencia muy suave que se hace regularmente para las fiestas; tarte à l’badré, que consiste en una masa horneada sobre la que se coloca una mezcla de flan y ciruelas; wafles de calabaza, y galopin, rebanadas de pan duro que se empapan de leche y huevo batido, se doran en mantequilla y se espolvorean con azúcar y canela.
La cerveza es una de las bebidas más populares en el área y se elaboran numerosas variedades de alta y baja fermentación. Asimismo, se suele beber champaña, sidra, néctar de riubardo y poiré, un aperitivo a base de peras. Otro licor tradicional es el hipocrás conocido desde la Edad Media, a base de vino tinto, miel, canela, jengibre, frambuesas, clavo y agua de rosas.
Los restaurantes en La Chapelle-en-Serval incluyen L’Opéra del Tiara Château Hôtel Mont Royal; In mano, que sirve comida italiana; Lal Qila, de cocina india; Le Chap’Val ,especializado en pizzas; Le Simbad, y Le Stradivarius.