En Vitoria-Gasteiz encontrarás platillos tradicionales y recetas imaginativas de la llamada nueva cocina vasca.
Álava es una de las provincias de España donde se rinde fiel homenaje a la expresión “frutos de la tierra”, como la alubia pinta alavesa, la patata y la miel del Gorbea, el aceite de oliva arróniz, el queso de pastor, la sal de Añana, la trufa negra de Álava, la seta perretxiko, el vino de Rioja Alavesa y el txakoli, un vino blanco, joven y afrutado.
Los potajes son una parte importante del recetario vitoriano, preparados con legumbres y hortalizas, en especial alubias rojas, pintas y blancas y las habitas a la vitoriana, cocidas en abundante agua.
Las carnes también son también muy degustadas, desde los chuletones (costillas de ternera) a la parrilla hasta los platillos de caza, como la morcilla (moronga) y la codorniz estofada, cocinada con cebolla, vino blanco, hojas de laurel y ajo.
Como en todo el País Vasco, el pintxo es también típico en Vitoria. Consiste en una pequeña porción de comida servida sobre una rebanada de pan o pinchada en un palillo. Aquí se puede encontrar, desde el clásico pincho de tortilla de patata elaborado con patatas alavesas, hasta nuevos diseños culinarios que combinan distintos ingredientes. Normalmente la gente local va de bar en bar saboreando uno o dos pinchos en cada uno junto con un vaso de Txakoli, vino rioja o zurito (cerveza pequeña). A esta combinación la llaman pintxo-pote.
Los postres tienen un gran arraigo en Vitoria. Algunos son las trufas de chocolate, el arroz con leche, el goxua, un dulce vasco elaborado con bizcocho, crema y nata, y el pastel vasco, hecho con manteca, harina y huevos, relleno de crema pastelera.
La Rioja Alavesa es conocida por sus excelentes caldos, y puede ser visitada en el popular enobús. Además esta ciudad cuenta con restaurantes galardonados como el Zaldiaran, con una estrella Michelín o el Sagartoki, que tiene el premio en el XII Campeonato de España de tortilla de patata.
