En la cocina de El Chaltén se percibe la influencia europea y los rastros de los aborígenes
La comida de El Chaltén está impregnada de las costumbres y sabores traídos por los inmigrantes de Europa. Entre esta herencia se encuentran platillos como la pizza; el fondue, que consiste en una mezcla de varios quesos servida con rebanadas de pan; el chucrut, que es col fermentada y raclette, un queso de origen suizo. Asimismo y gracias a la riqueza del océano, se consumen pescados y mariscos como vieiras, salmón, abadejo y merluza negra. También las carnes, principalmente asadas, son básicas en la dieta y se encuentran carnes que en otros lugares serían exóticas como jabalí y ciervo. Un platillo típico es el cordero patagónico, muy popular por su carne suave con poca grasa. Otros guisos heredados de los aborígenes que puedes intentar son pantruca, que consiste en trozos de una masa a base de harina de trigo que se cuecen y sirven en caldo de carne o verduras; tortitas fritas hechas con harina de la semilla del pehuén, y el curanto, un platillo en capas que tradicionalmente se hace en un hoyo en la tierra, cuyos ingredientes incluyen mariscos, carnes, papas, longaniza y legumbres, cubiertos con hojas que pueden ser hasta de col.
Entre los postres que puedes probar en El Chaltén hay dulces elaborados con frutas rojas, chocolates y la torta galesa, un pastel con frutas confitadas, pasas, nueces, miel y licor. Adicionalmente, para beber se elaboran cervezas artesanales de tipo irlandés y hay una variedad de vinos.
El Chaltén dispone de varios restaurantes, entre los cuales se recomienda la Ruca Mahuida. Para deleitarse con especialidades a la parilla están El Viejo Nando, Como Vaca y Mi Viejo. Por su parte el Techado Negro prepara trucha, pastas y platillos vegetarianos; y el Complejo Turístico Estancia Ricanor & Piedra del Fraile ofrece comidas caseras, pastas y pizza. La localidad cuenta con un par de cervecerías y bares como la Cervecería Don Guerra, la Cervecería artesanal El Chaltén y La Vinería que tiene más de 150 etiquetas de vinos y un menú de bocadillos gourmet. Visita la Chocolatería Josh Aike y degusta los helados artesanales de Domo Blanco.
